APRENDER A APRENDER
Opinión personal sobre este tema tratado en las actividades docentes:
Actualmente, existe una revolución tecnológica a la que estamos sometidos, por lo que es importantísimo el reciclaje de nuevos conocimientos, puesto que al mismo tiempo que se crean empleos relacionados con las nuevas tecnologías, los profesionales que no actualizan sus conocimientos en materia tecnológica, corren el riesgo de quedarse obsoletos y de perder el empleo. De ahí, la solución del aprendizaje adulto en estas materias, para poder renovar las capacidades, los conocimientos y las habilidades, con lo que estaríamos hablando, pues, de una formación continua o permanente del trabajador.
Es por todo esto, que se plantea la necesidad de que las personas que ya tienen una formación académica y experiencia laboral, tengan que usar recursos nuevos para actualizar o reciclar sus conocimientos para poder optar a nuevos puestos de trabajo. En esta tarea, es donde volvemos a englobar el aprendizaje adulto.
Además, debemos tener en cuenta algo muy importante, y es que en esa actualización o reciclaje, los adultos deben de tener claras unas premisas, ya sea para encontrar un nuevo puesto de trabajo como para el autoempleo y son la capacidad de autocrítica, la autonomía, la capacidad de razonar y el pensar.
Es bien sabido por todos, que el aprendizaje de un adulto es bien distinto al de niños o adolescentes.
Debemos tener en cuenta, que un adulto cuenta en su haber con una formación académica, unas experiencias personales y laborales vividas. Este conjunto, facilita el aprendizaje de nuevos conocimientos. Es decir, el adulto dispone de unas herramientas teóricas, mentales y expresivas para poder pensar, investigar y decidir sobre un problema planteado.
Pero, por contra partida, el adulto cuenta con una serie de actitudes bien divergentes a las de los jóvenes, como son la impaciencia por conocer resultados, la responsabilidad, el interés y la curiosidad, etc…
Es por todo esto que el aprendizaje del individuo adulto requiere una serie de recursos y herramientas distintas al aprendizaje de jóvenes, puesto que su sistema de aprendizaje es diferente. Lo que para un joven es nuevo a la hora de aprender, para el adulto no resulta nuevo completamente, sino que debe de aprender a formarse en esa materia o disciplinas, facilitado todo ello por las circunstancias que anteriormente hemos mencionado.
El adulto, pues en su proceso de aprendizaje, debe descubrir por si mismo los nuevos conocimientos a través de las herramientas que ya posee como son los conocimientos previos o transfiriendo los nuevos conocimientos a otras situaciones.
Cuando nos referimos a aprender a aprender, nos estamos refiriendo también a que se debe saber utilizar el material, la información y los recursos de que dispongamos para poder descubrir y resolver los contenidos de una manera autodidacta, ejercitando nuestra mente a que haga observaciones, formule hipótesis y resuelva conflictos.
En este contexto, el alumno aprende cómo debe formarse en los distintos contenidos y aprende cómo debe ejecutar esos contenidos de cara a un futuro profesional. Ésto sólo se consigue sabiendo que el alumno dispone de total autonomía para poder llevar a cabo este objetivo primordial.
El alumno al tener dicha autonomía es capaz de plantearse sus propias metas en su aprendizaje, de recopilar la información que vaya a necesitar para su formación, de analizarla y sobre todo, de aplicar dichos conocimientos nuevos y adquiridos, para en último término, evaluar su aprendizaje.
LA COMUNICACIÓN EN EL PROCESO DE ENSEÑANZA- APRENDIZAJE
Opinión personal sobre este tema tratado en las actividades docentes:
En el proceso de enseñanza- aprendizaje se pueden dar las siguientes barreras de comunicación:
- Enmascaramiento de la conducta por parte del docente.
- Presentación de excesiva información para procesar en poco tiempo.
- Falta de empatía del docente hacia el alumnado y viceversa.
- Falta de retroalimentación o feed-back.
- La falta de preparación previa por parte de los estudiantes que impide correctamente el aprendizaje.
- La falta de motivación por ambas partes.
- Uso del método no adecuado.
- Los materiales didácticos entregados al alumnado deben ser de buena calidad y que fomenten la motivación y participación.
Las soluciones que se pueden plantear pueden ser varias e intentar llevarlas a cabo simultáneamente algunas de ellas, y poco a poco obtener los resultados que pretendemos.
§ No aislar al alumnado en mesas individuales.
§ La temporalización de la clase debe repartirse más equitativamente en teoría y práctica, para motivar más al alumnado.
§ El material didáctico que se entrega puede ser más ampliado.
§ Realizar actividades de refuerzo para el alumnado si no presentan el nivel adecuado.
§ Hacer uso de métodos didácticos combinados como el método interrogativo, el expositivo y el activo, para fomentar la cohesión del grupo y hacer la clase más amena.
§ Realizar dinámicas de grupo.
§ Crear un buen ambiente.
§ Motivar y animar a la participación de los estudiantes.
§ Uso de medios didácticos adecuados que faciliten la labor docente y motive al alumnado y se adecuen a las necesidades y características del mismo.
§ Fomentar la retroalimentación o feed-back.
§ Mejorar la atención usando ejemplos, haciendo cuestiones y reforzando positivamente la atención y la participación.
§ Empatizar con el alumnado.
§ Mirar a los estudiantes al dirigirse a ellos a la hora de explicar.
§ Fomentar la escucha activa, no hablando tanto, no interrumpiendo a la persona que hable y mostrando una actitud receptiva con gestos y con el cuerpo.
§ Evitar en la comunicación oral la monotonía, usar frases directas al alumnado, usar el humor y ser breves y claros en la exposición de ideas.
En el proceso comunicativo, tan importante es saber expresarse con claridad como saber escuchar (que no es lo mismo que oir). Muchas veces como docentes cometemos el fallo de querer transmitir muchos conocimientos en poco tiempo sin tener en cuenta la capacidad retentiva de nuestro alumnado o si en el camino se han perdido. Es por esto que no sólo ahi que saber transmitir sino escuchar e interpretar los mensajes de nuestro alumnado.
ResponderEliminarEstás en lo cierto, Miguel.
ResponderEliminarEs muy importante el saber escuchar y saber interpretar en una clase la actitud del alumnado, sus comentarios y su expresión corporal que nos puede indicar muchas cosas acerca de cómo se está desarrollando nuestra clase.
Resulta un tema interesante para debatir, ¿verdad?
Un saludito
Estoy totalmente de acuerdo con todos los comentarios, ya que también pienso que es tan importante expresarse con claridad, como saber escuchar e interpretar la actitud del alumnado. También creo que favorecería el proceso de enseñanza-aprendizaje las siguientes consideraciones:
ResponderEliminar- Combinar diferentes tipos de metodología con técnicas de trabajo en grupo, ejercicios y estudio de casos prácticos.
- Ofrecer retroalimentación (escrita, oral y gestual) para conocer la interpretación que el alumnado hace del mensaje que se les transmite.
- Tener un conocimiento ajustado de las características del grupo y adecuar los contenidos al nivel de conocimiento del mismo.
- Intercalar ejemplos, notas de humor y anécdotas con el alumnado durante la exposición teórica, poniéndose el docente en el lugar del alumnado.
- Durante la exposición teórica, emplear toda la potencialidad motivadora de la comunicación verbal y no verbal.